UN ESPACIO PARA COMPARTIR EL PENSAMIENTO Y GENERAR VINCULOS DESDE LA REFLEXION ACTIVA A TRAVES DE LA LECTURA DE TEXTOS DEL AUTOR Y SUS IDEAS.

lunes, 29 de noviembre de 2010

sábado, 27 de noviembre de 2010

Diálogos con el maestro ''Lo que creo que soy''

Algunas veces me levantaba más temprano de lo habitual y me iba a pescar al río que corría cerca del lugar donde vivíamos. Aprovechaba la caminata y el momento de la pesca para reflexionar sobre los temas que surgían día a día y que en ocasiones no me dejaban dormir. Esa mañana, elegí un sitio agradable donde sentarme cómodamente, y mientras arrojaba el señuelo no podía dejar de pensar en un sueño que había tenido durante la noche, lo recuerdo como si fuera hoy:
Estoy en un parque de diversiones, recuerdo entrar en un laberinto de espejos, al caminar unos pasos, me giro para asegurarme donde queda la salida y al darme la vuelta ésta ya no se ve, sigo avanzando por los corredores y lo único que puedo reconocer es mi reflejo en los espejos, al tiempo de andar no puedo distinguir claramente quien soy yo, todos los reflejos se me parecen, aunque difieren en algo, unos eran más altos, otros delgados y otros exageraban los rasgos. La desesperación se apoderaba de mí y cansado de caminar sin hallar la salida terminé por dormirme, fue así que escuché una voz que me decía: “Yo no soy lo que veo pero veo lo que soy“. Me levanté de inmediato y con una gran decisión empecé a romper los espejos uno por uno, hasta que finalmente me hallé parado en medio de la nada y desperté.
Mientras trataba de entender el significado de esto, miraba mi rostro reflejarse en el agua quieta, fue la imagen del guía, que apareció por encima de la mía en el reflejo y su voz, las que me trajeron de vuelta.
-No lo escuché llegar, dije.
-Puede que tu cuerpo este aquí sentado pero si tu mente está en otro sitio, ¿dónde estas?
El guía se sentó a mi lado, apoyó a un costado el bastón que usaba en sus largas caminatas, y se inclinó hacia delante para ver que observaba en el agua.
-¿Qué ves? me preguntó.
-Me veo a mí mismo, respondí.
-¿Es que tu y tu reflejo son la misma cosa?
-Ciertamente no, pero ¿Entonces qué ven las personas que me miran?, pregunté.
-¿Qué ves tu cuando miras a otro? ¿Ves lo que es o ves lo que eres?
-Veo gente con defectos y virtudes.
-Defectos y virtudes, repitió el guía, ¿crees que puedes ver algo en los otros que tú no poseas?
Uno no puede ver al otro mientras no se haya visto a sí mismo, y para verse a sí mismo uno debe haberse vaciado, esa es la paradoja.
-¿De qué debe vaciarse uno? Dígame.
-De las falsas creencias, de la pretensión y del juicio, dijo el guía.
-¿Cómo sabe uno que se ha vaciado?
-Cuando puedas verte en el espejo sin temor al reflejo, y cuando puedas aceptar que no puedes mirar en los otros nada más que lo que eres, respondió el anciano. Recuerda que todo lo que amamos y todo lo que aborrecemos está dentro de nosotros.
Un tirón repentino de la caña me sacudió interrumpiendo el diálogo, empecé a traer hacia mí lo que había enganchado, era un pez pequeño pero muy luchador, al salir a la superficie el guía lo sujetó hábilmente, y mirándolo con fijeza me habló así:
-Ahora que este pez emerge de las profundidades y remueve tu reflejo, ¿Puedes seguir viendo lo que era, no será entonces preciso que algo surja desde lo profundo de ti para que esto cambie? Todos somos todos, cada uno de nosotros porta algo del otro, para bien o para mal. Cuando uno se ha vaciado de forma y contenido se libera al ser de su reflejo, y puedes verte a ti mismo y a los otros tal cual son.
El guía devolvió el pez al río, se paró, tomó el bastón con su mano izquierda y volvió a agitar el agua hasta que mi rostro no se podía distinguir en el reflejo, y dijo:
-Los otros son como trozos de un espejo que se ha roto, cada uno refleja partes de nosotros, y recuerda que “Yo no soy lo que veo, pero veo lo que soy”.
No pude preguntar al guía como había sabido lo de mi sueño. Se marchó antes de que pudiera ordenar mis pensamientos. Pasaron años hasta que lo pude comprender, el nunca me respondió, invariablemente ante mi pregunta solo sonreía con inocencia.

viernes, 26 de noviembre de 2010

Editorial Quien ve lo visto?

Camino por la calle una tarde calurosa de verano húmeda y asfixiante entre cantidad de personas que van y vienen. Una lluvia sorpresiva nos moja y es un bálsamo para algunos y una gran incomodidad para otros, no es difícil descubrir en sus rostros que piensa cada uno, que siente cada uno…
Según el ánimo se vive la experiencia y así, el que mira modifica lo que es visto. La identificación con una mente funcional al ego, que no reconoce principios ni valores y requiere del juicio subjetivo que le permite torcer la realidad a gusto de sus hábitos y tendencias, se expresa cómodamente descansando en la impunidad que le da la ignorancia. ‘’Según mi ánimo mis ojos y según mis ojos mi corazón’’
Viendo el entorno como una prolongación de mi mismo solo veo como estoy y las cosas se me van a antojar conforme a esto.
Si a este fenómeno se le dedicara un tiempo de observación podríamos descubrir mucho acerca de nosotros, al menos podríamos empezar a tomar una distancia de tantos humores, de tantos juicio ligeros y de tanta sensación negativa que se justifica en un afuera que no nos da el gusto.

domingo, 14 de noviembre de 2010

Editorial ''Reconciliar el pasado''

Sea cual sea la etapa de la vida en la que uno se encuentra, uno está aquí, y este no es un hecho menor si entiendo que todo lo vivido tiene que haber sido elegido conforme a las necesidades del momento. Dependiendo de cuan cerca de lo deseado como objetivo de vida uno este tiende a calificar su vida como un éxito o no. Lo cierto es que la suma de nuestras decisiones mas allá de nuestros juicios subjetivos, nos permitieron sobrevivir tanto física como psíquicamente, y llegar hasta aquí.
''Uno está aquí y no es un accidente, es consecuencia de las cosas que fueron hechas. Pero como se está aquí es el resultado de cómo fueron hechas esas cosas''.
En este momento y a la hora en la que uno tiene que decidir hacia adonde se dirige, cansado de estar solo satisfecho o desconforme, tan importante es la dirección que se toma como la forma en la que se emprende el camino.
Somos en un presente que está teñido de pasado, un pasado que modela las reacciones y la forma de todo cuanto hacemos a diario. Ignorada las razones y el tiempo desde el que se mueven hacia hoy, somos víctimas distraídas de emociones propias perdidas en el tiempo. Reflejos aprendidos ejecutando una melodía que se repite con distintos arreglos, para un escenario y un público a veces nuevo.
De este hecho surge la necesidad de hacerse claro respecto de las propias situaciones y de reconciliarse con el pasado. De encontrar la raíz de las formas que generan tantos estados de miserias psíquicas y sus orígenes. Para esto va a ser imprescindible una guía en esa dirección que facilite los recursos para reconocer los mensajes perdidos que impiden la reconciliación y el orden interno.
''Cuando la mirada penetra en lo profundo de las cosas y al hacerlo se dirigen las tres fuerzas como si fuesen una, entonces la confianza en un sentido mayor se evidencia y la coherencia nos muestra el camino''.

jueves, 11 de noviembre de 2010

lunes, 8 de noviembre de 2010

Indagación activa...

El que realmente eres, habita en el espacio que queda entre un pensamiento y otro...Cuanto lugar le estás dejando?

sábado, 6 de noviembre de 2010

Pensamiento...

Si tomas cada una de tus emociones y sigues sus pisadas, el sendero que trazan solo te llevará hasta el amor o al miedo.